Respondiendo a un RFI del Ministerio del Interior para renovar los sistemas de escucha en los locutorios de las prisiones, se ha puesto a punto un sistema de micrófonos IP tanto cableados como inalámbricos por WiFi. El micrófono, de muy alta sensibilidad, sólo ocupa 4 x 2 x 1 cm y está basado en una placa Arduino programada a bajo nivel. Un asterisk instalado en cada centro penitenciario será quién buferice las grabaciones y las envíe por streaming a la nube, donde se almacenarán. Se ha previsto un API REST de control para que sea controlado por software de gestión de terceros.